Sandía grande, no come sólo.
Fecha: 13/11/2020,
Categorías:
Dominación / BDSM
Tus Relatos
Autor: Gozadera Oculta, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... parecería similar a una casa de citas, esperamos que nos asignarán una habitación, al entrar a ellas, pude observar cuartos llenos de ropa sensual, pelucas, lencería, senos de plástico. Entramos a la habitación que nos asignaron que es más como un vestidor, con muchos espejos y mucho maquillaje. Al fin, se incorporó a nosotros un maricón de los más estereotípicos, al que ella saludo con confianza y naturalidad diciendo: pues ahora te traigo a éste, como hombre ya no me sirve, aunque me cae bien, me lo quedaré de amiga un tiempo.
Tampoco entendí nada.
Me pidieron que me desnudara y me parará en un espejo de cuerpo completo de tres hojas que da una perspectiva de 180 grados del cuerpo y queda uno un poco en alto sobre una tarima. Allí el maricón emitió su veredicto: pues, las piernas torneadas nos pueden servir, las tiene bastante gordas y con un poco de inyecciones y depilación queda presentable, esta grasa en las caderas la podemos moldear, la grasa de la panza, la podemos drenar y con un buen corsé quedará menos mal que algunas, lo que me preocupa es la espalda, tendremos que poner unas tetas postizas enorm... -a lo que Carolina interrumpió- nada de postizas, hoy mismo, con la grasa de la liposucción le pondremos la tetas tan grandes como sea necesario para darle simetría, quiero que sea una golfa de oro. A lo que el maricón continuó: como quieras, pero yo no me hago responsable querida; así siguieron hablando de como me maquillarían por hoy, la depilación total y de ...
... cómo podrían arreglarme la cara y el pelo, por mientras.
Entendí, pero no quise entender.
Así fue como desperté adolorido, depilado, maquillado, con peluca, con unas tremendas tetas aún más grandes que las de ella, con un culo desproporcionalmente enorme aún para mí, afortunadamente, aún con pene.
Ellas al verme despertar, me dijeron que era hora de escoger ropa, lo hicieron con tal autoridad que aunque hubiera querido resistirme no hubiera podido, en realidad, siempre había fantaseado con algo así, por lo que me deje guiar. Estaban entre un pantalón de mezclilla muy ajustado o unos leggins, yo me atreví a opinar que tenía unas piernas deliciosas, y que el haber dejado de hacer ejercicio les daba forma carnosa de consistencia de mujer, por lo que quizás luciría mejor en una minifalda negra de piel. Carolina se acerco intimidante sin dejar de verme, hasta el punto de asfixiarme con sus tetas al estar yo sentado en una silla y ella de pie y me dijo: las putitas no deberían opinar, pero mientras no me contradigas y seas una buena compañera de puteria, te lo voy a permitir. Está bien Marco, dale su falda a la putita.
Respecto a la blusa, consideraron que me ayudaría más una de color blanco, holgada y con un buen escote que transparentará mis nuevas tetazas, sin embargo, también opine: creo que sería mejor un corsé que me las apriete y me marque cintura. Concedido.
Para no desentonar, me pusieron los mismos tacones que a Carolina, negros, con estoperoles, como de ...