1. Yo y mis hermanas gemelas


    Fecha: 10/04/2018, Categorías: Gays Autor: tranque, Fuente: CuentoRelatos

    ... respuesta tenía que ser afirmativa pero tenía que advertirle que no era algo fácil de hacer con alguien que no tiene experiencia. Romina busca el consentimiento de Alicia, la que acepta con ganas y valentía, ya era mi víctima.
    
    Les explico que primero hay que acostumbrar el esfínter, ir ablandándolo, agrandarlo y que podía doler mucho. Como el tiempo que teníamos no era mucho y como Romina no era el objeto del experimento, ella acepta y apura el trámite, dice que en el baño hay un pote de vaselina y que con eso podemos empezar a dilatar a mi hermana.
    
    Para mí todo era una locura, pero ni quería pensar, sólo quería penetrar. Romina llega con el pote y se unta los dedos en vaselina, empieza con uno y luego dos a hurgar en el ano de Alicia, las dos eran un dúo perfecto, dos gemelas que parecían una sola metiéndose el dedo en su propio culo, casi como un espectáculo de ciencia ficción, yo no paraba de frotarme la pija buscando la mejor erección.
    
    Romina cree haber ablandado el esfínter y me propone que pruebe, yo me unto el pene con vaselina y lo arrimo. Hago un primer intento, pero la cabeza de mi pene es muy grande, casi de 7 centímetros de diámetro, cuando está en plena erección. Empujo pero no entra y le digo a Romina que pruebe de nuevo con sus dedos. El tiempo pasaba y se acercaba la hora en que regresaba mi madre. Romina me insiste a que pruebe, empujo nuevamente pero su ano estaba muy apretado, Romina insiste, me alienta a empujar con fuerza, dice que tenemos poco ...
    ... tiempo. Decido tomar a Alicia de sus hombros y empujar con fuerza, de a poco el culo cede, pero no del todo, sentía como si una frontera lo impedía, tomo coraje y le doy un empujón y la cabeza entra de golpe, Alicia pega un grito que me detiene, le pregunto si sigo pero no contesta, pero Romina me alienta a que siga, empujo más fuerte y tengo la mitad de mi pene adentro, sentía que me lo apretaba con mucha fuerza, decido empezar a sacarlo muy despacio pero aunque intento muy lentamente para ella el dolor era insoportable, y sigue gritando, Romina intenta calmarla pero ella se asusta y empieza a llorar, yo no sabía qué hacer, la dureza de mi pene no cedía, parecía que la presión de su esfínter no dejaba circular la sangre con normalidad y la mantenía en el glande, comenzaba a dolerme el pene, era una situación que se aceleraba por el miedo de la llegada de mi madre. Trataba de sacarlo y parecía imposible, entramos en pánico, mis dos hermanas lloraban y yo con el pene adentro de mi hermana. Los tres desnudos al sol, yo con la pija adentro del culo de mi hermana, abotonados sin poder despegarnos y el tiempo que se aceleraba. No sabíamos que hacer. Romina trae un balde con agua y nos lo tira, pero no éramos perros, su experimento no funcionaba.
    
    Ya eran aproximadamente las cuatro y media y la situación no cambiaba, ya casi no sentía mi miembro, estaba empezando a tener miedo, si se enteraba mi padre, literalmente me mataba.
    
    Pasan diez minutos y escuchamos la puerta de entrada ...
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