1. Dulce y amarga amistad (11)


    Fecha: 10/06/2018, Categorías: Gays Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... pesara y atravesó a suaves zancadas el salón y el pasillo, mirándome y bajando la cabeza para besarme ocasionalmente.
    
    Me sentía como un bebé entre sus brazos, igual a cuando me sostenía para que brincara en su piernas, llegó a un dormitorio y me dejó en el suelo para descorrer, como antes hiciera en el salón, las persianas y que la luz natural invadiera la habitación.
    
    Comenzó a desnudarme, le temblaban las manos y no acertaba.
    
    -Déjame tito, ya lo hago yo. -Me desnudé en un segundo y él luchaba con su ropa para arrebatársela del cuerpo, me quedé quieto observándole como iba apareciendo desnudo al retirarse la ropa. Ya le conocía y le había visto miles de veces por partes, no desnudo del todo, pero no por ello dejaba de admirarme el extraordinario macho que se me presentaba, sabía que tenía una gran verga y sentí un escalofrío al mirarla, no tenía parangón con la de Alfonso, tan niño, ni con la de su hijo Demian, un joven en desarrollo, ni con la de Juan Carlos, un hombre ya maduro, era la mayor verga que veía hasta el momento, y sus testículos hermosos, morenos y llenos de vello parecían pesar mucho.
    
    Terminó de desnudarse, quedó con los calcetines negros y me envolvió en un abrazo que pretendía asfixiarme, me envolvió entre la fronda de los pelos que le cubrían el pecho, el vientre algo panzudo y todo lo que rodeaba sus genitales.
    
    Empezó a besarme la cara, los labios, su boca ardía, su bigote me arañaba, su aliento abrasaba y sus manos sujetaban mis nalgas como ...
    ... si fueran de su propiedad.
    
    -Bésame tú bebé, dame tu lenguita rica. Así, así me gusta, haz feliz a tu tío precioso. -Hacía lo que me pedía sin dudarlo y le lamía los labios gruesos, el bigote duro, y le metía la lengua para que él me la chupara queriendo arrancármela de la boca. Me trataba como a un muñeco de trapo, moviéndome para donde quería, enredando sus piernas con las mías haciéndome sentir sus pelos gruesos, la dureza de sus piernas lastimando las mías cuando las apretaba encerrándolas con las suyas poderosas de hombfre.
    
    Cuando se cansó de besarme y lamerme todo el cuerpo me dio la vuelta colocándome boca abajo, tiró bruscamente de las caderas elevándome el culito y aplastándome el pecho y la cara sobre la ropa de cama, me las abrió con sus fuertes manos tirando de los cachetes y enterró su cara en la raja.
    
    Me hacía gritar y llorar, gozando su lengua metida en mi hoyito, apretaba tanto que consiguó penetrar el esfínter y follarme con la lengua dura y húmeda.
    
    -¡Ayyyy! Más tito más, dame tu lengua en el culo, ¡qué rico me lo haces! ¡Ayyy! ¡Ayyyy! ¡Ayyyy! -Gritaba incontroladamente, me sacudía en violentos espasmos girando las caderas para que su lengua entra más profundo.
    
    -¿Te gusta bebé? ¿Te gusta lo que te hace la lengua de tu tío? Dime que te gusta, quiero oírlo. ¡¡¡Dílo!!! -Grito dejando de chuparme el culo y meter la lengua, yo no quería eso.
    
    -Sí, sí tito, me encanta, me vuelves loco de placer.
    
    -¿Soy mejor que Demian? -No pensé mi respuesta, no ...
«12...456...11»