Lo que pudo haber sido (Parte V)
Fecha: 18/11/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Cold_P, Fuente: CuentoRelatos
... completamente flácida
- No tienes por qué disculparte – me reclamó algo molesta – Pero bien me advirtió Elena que eras así
- ¿Así cómo? – quise saber
- Que siempre te andas disculpando – me explicó – No tienes por qué hacerlo. Tú eres el amo aquí. Es tú placer el que importa. Grábatelo. Yo soy sólo una puta.
- Eso no es cierto…
- Si es cierto – me interrumpió – Soy una puta, que fue vendida por su amo. Él me vendió a ti, por lo tanto, tengo que satisfacerte. ¿Te excita pegarme? Pégame, para eso me pagaron. No tienes que disculparte corazón. ¿Quieres que me trague tus meados, que me coma tu mierda? Mi amor, yo soy tu W.C. personal – lo dijo con tal firmeza que me sorprendí – No tienes por qué pedir perdón. Además, eso habla de que no eres un buen amo…
- ¿Perdón? – repuse ofendido
- Corazón, con ese tipo de cosas, tu autoridad se ve afectada – me explicó – Deberías de ser más duro. Tener más sangre fría. Sí, debes de ver por la seguridad de tu pareja, pero a esta puta le gusta el maltrato. Golpéame.
- Pero siento que me excedí un poco en cómo te traté…
- ¿Excederte? – exclamó con evidente hastío – Lo que me has hecho apenas son caricias a comparación de lo que me hace Vale. ¿Y si te excediste qué? Que te valga madres. Pero te reitero, tú eres el que manda, yo no soy quien para juzgar. Incluso, creo que debería ser castigada por tener el atrevimiento de haberme orinado o haberte insultado… haberte hablado así...
- Pero si me ha encantado. Es más – ...
... comenté y a manera de ejemplificar mi gusto por aquello, le di un buen sorbo a sus muslos y un buen lametón a su vagina, limpiando un poco de toda la orina que había ahí.
- ¡Ay mi amor! – exclamó - ¡Qué rico! Y que rico que te guste también
- Elena jamás habría hecho eso ni nada de lo que hiciste antes – comenté refiriéndome a ella cuando se comió su propia mierda.
- Al principio a mí tampoco me gustaba – me contó mientras yo me sacudía la verga, salpicándola del poco semen que seguía goteando – pero Vale me obligaba… al final me terminó gustando… me hace sentir más perra… más sucia... más humillada…
- Ojalá Elena pensara así…
- No tiene por qué pensar así. Simplemente tiene que hacerlo. – dijo Maru – Oblígala, ella es tu puta, ¿no es así? Ella debe de hacer lo que tú le mandes. Y si no lo hace, castígala.
- Pienso que debe de haber un consenso y que todos tenemos límites – me defendí – Y creo que ese es el límite de Elena
- Si… y no – comentó y se acomodó mejor en el sofá – Tienes razón en parte, pero cada quien habla de cómo le va en la feria. A mí me gusta cómo me trata Vale y he visto cómo otros amos tratan y educan a sus esclavas, pero, es cierto, cada quien es diferente. Podrías intentarlo de todas formas.
- Eso sí puede ser una opción – convine y sentí la necesidad urgente de mear – Veré que hago en ese aspecto.
- Yo sólo estoy opinando, te reitero, tú eres el que manda aquí – se disculpó – Probablemente no debería desafiar tu autoridad ni ...