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Lo que pudo haber sido (Parte V)
Fecha: 18/11/2022, Categorías: Infidelidad Autor: Cold_P, Fuente: CuentoRelatos
... un fugaz brote de ira - Me dijo que te gusta hablar mucho y analizar todo – respondió Maru divertida - Pinche vieja… - Pero está bien – intentó tranquilizarme – cada quien es diferente y yo me puedo acoplar. Es un buen cambio de hecho - ¿Qué cosa? – pregunté algo perdido - Pues siempre sólo me cogen, me maltratan y ya – explicó Maru recargándose en mi rodilla – me gusta y mucho que lo hagan… el sentirme un vil pedazo de carne o un simple objeto… mmmm… me mojo… pero hay veces que también quiero sentirme distinta y tú me estás haciendo sentir distinta. - ¿Cómo es eso? – pregunté - Pues es la primera vez que alguien se interesa en saber cómo es que llegué al extremo en el que estoy con Valentín - ¿Así se llama tu esposo? - Si, aunque todos le decimos Vale – me explicó. Tomó nuevamente su copa de vino y la apuró de un solo trago. Seguía a mis pies. – Además de que sigues queriendo hablar conmigo y saber más de mí - Eso tenlo por seguro – me incliné para tomar mi copa - Además, tenemos que esperar a que se te vuelva a parar – comentó señalando mi flácido instrumento – A menos que quieras que te lo levante – sugirió pícaramente - Antes quisiera saber cómo es que empezó todo esto - ¿No te rindes verdad? – comentó con cierto hastío, pero sonriente – Te propongo algo corazón – me dijo incorporándose un poco y acariciando mi pene con delicadeza – Déjame intentar parártela, porque de verdad estoy muy caliente y necesito que me cojan duro - Si ...
... me das diez minutos… - No puedo esperar tanto – añadió dándole un beso – Elena me dijo que también te gusta maltratarla… - ¿Qué tanto sabes de mi esposa y de mí? – quise saber - ¿Eso es un sí? – preguntó insistente a lo que yo asentí – En ese caso, aquí me tienes corazón, muéleme a golpes, trátame como la puta que soy. Y si eso no te la pone dura, ya me encargaré yo… - Lo que quiero saber – le interrumpí con algo de impaciencia – es cómo hemos terminado aquí los dos y que respondas a todas mis preguntas. Ya después de eso hacemos lo que quieras - Y si me niego, ¿me sacarías las respuestas a golpes? – sugirió con lívido - ¿Acaso quieres que te golpeé? - Por Dios corazón, te lo estoy rogando Se levantó y con un simple movimiento se despojó de su vestido bajo el cual estaba completamente desnuda. Lo primero que me llamó la atención fue que tenía ambos pezones perforados y un tatuaje cerca de las costillas que decía claramente “puta de Vale”. Al observar su prominente panza y sus pequeñas tetas, me di cuenta de que tenía marcas de azotes y algún moretón aquí y allá, además de algunas señales inequívocas de que le habían apagado algunos cigarros en la piel. Maru se me quedó viendo mientras yo la miraba de arriba abajo. A pesar de que no tenía ni cinco minutos de que había eyaculado, me calentó ver su cuerpo lastimado y mi verga comenzaba a despertar nuevamente. Si, Maru era gorda, pero se notaba a todas luces que le encantaba ser maltratada. Hipnotizado ...