Vengándome del hijo de puta de mi vecino
Fecha: 11/12/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Chrom, Fuente: CuentoRelatos
... vecina. Los vírgenes pliegues de su ano se contraían cada vez que mi polla se clavaba hasta lo mas profundo de su coño invitándome a desflorarlos.
Salí de su interior y le pedí que no alterase su postura. Últimamente habíamos incorporado a nuestros juegos varios juguetes tales como consoladores, bolas chinas y una bala vibradora. Tomé ésta última y se la mostré a la zorra, pues ya hace días que había ascendido de categoría dejando atrás su etapa de aprendiz, provocando que ambos estallásemos en carcajadas al recordar lo sucedido el domingo anterior.
Dos días atrás, había vuelto a asistir con mis padres a misa con la salvedad de que esta vez nos habíamos sentado en la primera fila, bien a la vista de Ramón y su familia. En el momento en el que Ángela comenzó a leer el Nuevo Testamento frente a la congregación, pulsé el botón de encendido del mando a distancia y la bala vibradora que llevaba alojada en el interior de su coño comenzó a vibrar provocando que elevase nerviosa su mirada hacia mi y errase en la lectura. Ramón fue consciente de que algo "raro" estaba ocurriendo. Siguiendo la mirada de su hija, dio conmigo y clavó en mi una mirada de odio pensando que estaba haciendo gestos raros para incomodar a su hija.
Me coloqué de nuevo tras Ángela y me metí la bala en la boca para lubricarla. Mi vecinita, arqueo la espalda alzando su grupa al tiempo que apoyaba la cara sobre el dorso de sus manos. Dejé caer un poco de lubricante sobre el valle formado entre sus nalgas, ...
... que resbaló sobre su ano recorriendo el perineo lubricando su coño y goteando sobre la bala que había apoyado en su clítoris. Separé los labios vaginales con la punta de mis dedos y empujé suavemente la bala dentro de ella. Al tiempo que la encendía al mínimo, presioné su botón del placer con mi pulgar y ataque su ano con mi lengua. Las caricias de mi lengua acentuaron las contracciones de su culo y tras besar el nacimiento de sus glúteos, introduje la primera falange de mi dedo corazón en su culo.
Sentí como su ano reaccionaba ante la intromisión y presionaba mi dedo atrapándolo. Con la promesa de ser cuidadoso, volví a la carga moviendo lentamente el dedo en su interior.
Mientras la bala vibradora estimulaba su coño, mi pulgar hacía lo propio con su clítoris por lo que la mezcla de sensaciones facilitó que poco a poco, mi dedo corazón fuese abordando su esfínter. Cuando finalmente, todo mi dedo se había perdido en el interior del culo de Ángela, lo retiré y repetí de nuevo la operación, utilizando esta vez dos dedos.
Durante una hora jugué con su culo, no tenía prisa, quería que fuese placentero y perdiese el miedo al sexo anal y que lo disfrutase de tal manera que ella sola lo buscase en futuros encuentros, por lo que dediqué todo el tiempo posible a prepararla para recibir la invasión de mi polla.
Mis dedos se movían con facilidad en su interior, y llegó el momento de dar paso a mi verga. Coloqué el glande en su ya dilatado ano y empuje lentamente disfrutando ...