1. Mi amigo de la infancia


    Fecha: 31/03/2023, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... primer beso. En todos los años que nos conocíamos jamás nos habíamos besado en los labios. Disfruté como una loca, creo que fue incluso mejor que los anteriores orgasmos. Al menos hasta que, sin que me diera cuenta, me llevó cogida hasta la piscina y saltó al agua.
    
    —Cabrón — le dije solo medio en broma.
    
    —Te quiero.
    
    —Gilipollas.
    
    —Te adoro.
    
    —Imbécil.
    
    —Te amo.
    
    —Idio… ¿qué? — por fin sus palabras habían llegado a mi cerebro.
    
    —Te amo.
    
    —No digas tonterías. Tú y yo somos amigos — le dije bajando mis piernas de sus caderas y separándome. Él me agarró de las manos para que no me fuera.
    
    —Pues claro que somos amigos, y la gilipollas eres tú por no darte cuenta de que te quiero. ¿Es que los amigos no pueden quererse? ¿Hay alguna norma estúpida que diga que dos personas no puede ser amigos y amarse?
    
    —No, pero…
    
    —Pero nada. Siempre seré tu amigo, siempre. Eso no quita que quiera ser tu pareja, tu novio, o tu marido. Me pondría de rodillas para decírtelo pero no hablo muy bien debajo del agua. Ahora tú decides. Solo tienes que pensar una cosa: ¿me amas? Antes de que pudiera responder volvió a besarme. Respondí automáticamente abriendo los labios y dejándole entrar. Si yo tenía un don para mamar pollas, Lucas tenía un superpoder para besar. Me hizo desear que el beso no terminara nunca. Al final tuvimos que parar para respirar.
    
    Mi cabeza estaba hecha un lío, no estaba preparada para esto. Pensé en lo que quería a mi ex. No era ni parecido a lo que ...
    ... quería a Lucas. ¿Eso era bueno o malo? Evidentemente el sexo con Lucas, aunque no habíamos follado, había sido el mejor de mi vida. ¿Cómo sería si folláramos? Mi amigo me miraba intentando descifrar mis expresiones mientras yo cavilaba a toda velocidad. ¿Merecería la pena perder un amigo para ganar un amante? ¿Podría Lucas ser todo en uno? Eso sería como si me tocara el gordo de la lotería. ¿A quién le contaría mis problemas de pareja si Lucas era mi pareja? Mi cabeza no sabía qué hacer, no era capaz de aclararme, pero comprendí de sopetón que mi corazón ya había decidido. Era una imbécil.
    
    Solté sus manos y salí de la piscina. Fui hasta la mesa y me senté en el borde. Miré a Lucas que me contemplaba abatido desde el agua.
    
    —Ven aquí y fóllame, amigo. ¿Cómo voy a saber si mereces la pena si no me sabes complacer con ese minipene? — la confianza que nos teníamos me permitía bromear con Lucas incluso en esos momentos.
    
    La sonrisa que se le puso en la cara iluminaba más que la luna llena y derritió mi corazón. Abrí las piernas para recibirle. El muy capullo me torturó jugando con el glande en mi entrada. Recorría mi rajita de arriba a bajo y me daba golpecitos en el clítoris. Me estaba poniendo muy cachonda.
    
    —¿Así que minipene? — me dijo —. Varias veces has menospreciado mi estupenda polla esta noche. Ahora vas a tener que pedirlo.
    
    Siguió jugando conmigo, acariciando con la punta mi anhelante coñito. Me daba besos suaves y cortos, jugando también con mi boca. Cuando me ...