HASTA LA CIMA - CUARTA PARTE
Fecha: 20/04/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: maia24, Fuente: RelatosEróticos
... alejarás de ella.
Adrián no me había dicho lo que había sucedido entre ellos, pero sospechaba que tarde o temprano lo sabría, probablemente de la boca del propio Massimo. Anoté mentalmente prestar más atención a los detalles de la relación entre esos dos hombres y dejé el tema para después.
Por otro lado, la conversación con los tres cerditos me había recargado la barra de motivación, y cuando llegué por Massimo al gimnasio lo hice a lo antaño, con un gran ramo de flores.
—Soy alérgico a las flores —zanjó Massimo al verlas.
Yo fruncí el ceño.
—Eso no es verdad —negué—, me he tenido que aprender tu lista de alergias para no matarte en un restaurante.
Massimo sonrió.
—O matarme sin dejar indicios.
Caminamos rumbo a la salida; yo con el ramo de rosas entre los brazos y Massimo terminándose de secar el sudor del cabello.
—No me dejaría exenta, ¿no te enteraste del caso de Michael Jackson? Es una gran teoría conspirativa.
—No creo en las conspiraciones —dijo arrugando la frente.
—Te la contaré de todas formas.
Me fue suficiente un solo momento de meditación en la sala de estar en mi apartamento para cambiar radicalmente con Massimo.
De pronto, me había convertido en la colegiala colgada del chico más guapo de la escuela. Esa colegiala que fungía como su mejor amiga y lo cuidaba como a una madre, esperando que tarde o temprano pudiera reconocer su valor y aquel chico deslumbrante le pidiese que llevaran su romance hasta la ...
... universidad.
Si yo era una molestia, Massimo no lo hizo notar en lo absoluto. Escuchaba mis teorías conspirativas que miraba por internet, y tras haberme comentado que no era de su agrado —oh, grato error—, me aprendí cientos de conspiraciones más. Incluso las más tontas. Pero a Massimo parecía no importarle, y en un primer momento no pude reconocer si esa era la reacción que estaba buscando. Incluso había llegado a sentarme fuera del cuarto de baño para seguir contándole alguna de las historias de fantasía mientras él tomaba su ducha de ley tras la rutina.
Massimo no fue grosero, pero tampoco interactuaba con mis historias. Se mantenía callado, pero sin estar ausente, serio, pero sin un gesto de disgusto. Me escuchaba como Lian me escuchaba a veces: parecía que no lo hacía, pero cuando yo me quedaba en silencio él me preguntaba algo que me aseguraba que había estado escuchando.
Las preguntas de Massimo eran simples, resumidas a:
¿de dónde sacaste eso? ¿De verdad crees que podría ser posible? ¿No te interesa algo más?
Pero aun cuando gran parte del día practicaba largos monólogos sin descanso, lograba hacer mi trabajo con el menor margen de error que mi experiencia me otorgaba. Era verdad que Emilio se había convertido en uno de mis contactos más frecuentes, incluso por encima de Marena, por lo que gran parte de mi éxito en las primeras semanas era debido a él. Pero conforme pasaban los días había comenzado a conocer a Massimo, y el sentido común me había ayudado a causar una ...